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Banquette de Fumoir
Este mueble creado por Héctor Guimard en 1897 y es parte de los muebles creados para el Castell Béranger de París. Este extravagante mueble fue diseñado para que este en ángulo en una estancia, por eso es que la vitrina se encuentra a lo alto formando un pequeño techo. El cojín no es el que se encontraba originalmente en la obra, si no que este tuvo que ser sustituido por el deterioro que tenía.
Héctor Guimard es el máximo representante del Art Nouveau, al menos en Francia. Para el mueble no debe estar separado o aislado, más bien tiene que estar integrado a la totalidad de un hogar o de donde sea que sea, tiene que ser parte de un todo.
Héctor Guimard siempre destacó por su capacidad creativa y artística, siempre atraído por el modernismo que así nos trajo obras de extraordinaria belleza, fantasía y creatividad. Guimard siempre fue fiel a su estilo y a su manera de entender y ejecutar el arte. Guimard fue quien verdaderamente logro experimentar con todo aquello que el podía fabricar en un taller, nunca perdiendo la decoración exuberante de los muebles, como en este. De hecho, muchos de sus modelos son modelados en yeso antes de ser estampados o modelados, con esto logra concentrarse en ciertos de detalle que hacen que el mueble sea algo especial.
Tips
Guimard, a diferencia de muchos artistas, era un hombre solitario que no dejo una escuela ni un solo discípulo. Su carrera realmente duro tan solo quince años, pero el legado que dejo es incuestionable. Guimard fue inspirado por las teorías de Eugène Emmanuel Viollet-le-Duc quien sentó las bases del Modernismo.
Fue con sus diseños de los muebles del Castell Béranger que Guimard se vuelve conocido y que también le permite hacer diversas experimentaciones e investigaciones en cuanto a la estética y a una concepción del decorado.
Guimard es conocido por haber hecho las entradas del metro de Paris, las cuales tienen esa decoración muy caracteriza de este estilo de arte del que el fue un gran representante. De hecho, con estas entradas del metro, Guimard se convierte en un precursor de la industrialización del arte a gran escala.
El problema de Guimard es que varias de sus obras, un problema típico en el art noveau es que la mayoría de las personas jamás podrían costear una de sus creaciones, además de diversos comentarios que hizo. Lamentablemente Guimard murió en el olvido en Nueva York en 1942 gracias a que tuvo que huir de Francia durante la Segunda Guerra Mundial debido a que su madre era judía.